Guía : Las 4c´s de los diamantes
Al elegir un diamante, es esencial conocer los 4Cs: Corte (Cut), Color, Claridad (Clarity) y Quilates (Carat). Estos factores determinan la calidad, el valor y el brillo de cada piedra preciosa. A continuación, te explicamos cómo evaluar cada uno para tomar la mejor decisión.

Corte
El corte del diamante afecta directamente su brillo. No se refiere a la forma (como redondo u ovalado), sino a la calidad con la que ha sido tallado. Un buen corte refleja la luz de manera óptima.
- Excelente – Refleja la luz perfectamente
- Muy Bueno – Ligera pérdida de luz, pero visualmente atractivo
- Bueno – Aceptable si el presupuesto es más ajustado

Color
El color del diamante se clasifica de la D (incoloro) a la Z (con color visible). Cuanto más incoloro, mayor es su rareza y valor.
- D–F: Incoloro
- G–J: Casi incoloro (gran relación calidad-precio)
- K–M: Tinte ligero, ideal con oro amarillo

Claridad
La claridad evalúa las inclusiones internas o imperfecciones externas. La escala GIA incluye:
- FL/IF – Flawless o Internamente Flawless
- VVS1/VVS2 – Inclusiones muy difíciles de ver
- VS1/VS2 – Muy pequeñas inclusiones
- SI1/SI2 – Ligeras inclusiones (invisibles a simple vista)

Quilates
El quilate mide el peso del diamante. 1 quilate equivale a 0.2 gramos. El precio aumenta a medida que sube el peso, especialmente en diamantes de 1.00 ct o más.
Consejo: Un diamante de 0.90 ct puede lucir similar a uno de 1.00 ct, ¡pero cuesta mucho menos!